domingo, 29 de julio de 2012

Capìtulo 55: el gran día


Me desperté con el sonido del despertador, normalmente odiaba cuando ese trasto sonaba, su sonido se te metía hasta bien dentro de la cabeza y te martilleaba la cabeza hasta que te despertabas, pero hoy ese sonido no me molestó, incluso me hizo sonreir.
Había dormido muy bien y tenía buena cara, pensaba que no pararía de dar vueltas y dormiría un poco mal por los nervios, todo el mundo me lo habia avisado que la noche de antes estaría muy nerviosa, pero no había sido así, la verdad es que no me había sorprendido para nada que no estuviese nerviosa, yo misma sabía el por qué, la gente muchas veces no esta segura de dar este paso de casarse con alguien, ni siquiera aunque lleven muchos años juntos y se conozcan a la perfección, mucha gente tiene miedo al compromiso, tienen miedo de un “para siempre”, “hasta que la muerte os separe”,pero yo no, yo estaba segura, yo no dudaría al decir “si quiero” esperando que el cura dijese “ yo os declaro marido y mujer”
Me levanté con mucho cuidado de la cama para no despertar a Pablo, aunque estaba dormido como un tronco, me vestí en silencio y antes de irme le di un beso en la frente.
La noche anterior había dejado todo preparado y había quedado con Mery para que me acompañase a la peluquería y me vistiese en su casa. Ella ya estaba allí cuando salí de casa, puntual como siempre.
Fuimos en el coche hasta la peluquería, allí me hicieron un recogido informal pero muy bonito y sencillo, Mery también se peino, llevó todo el pelo al lado rizado, acompañado de una trenza, la verdad es que estaba guapísima.
Sabía la ilusión que le hacia a la madre de Pablo ser la madrina y no lo dudé ella sería mi madrina y mi padre el padrino, como había ocurrido en muchas bodas.
La boda iba a ser pronto, por la mañana así que por eso había empezado a prepararme tan pronto, como me había levantado a las seis no había desayunado nada, ya que a esas horas una no tiene hambre, pero ahora mi estómago empezaba a pedir algo.
Cuando salimos de la peluquería fuimos a desayunar a un bar que había al lado, tras desayunar tranquilamente nos dirigimos a casa de Mery, ambas nos defendíamos bastante bien maquillándonos, así que Mery me maquilló a mi y yo a ella, el resultado fue magnifico.
La hora llegaba, la mañana avanzaba a pasos gigantes y ya nos teníamos que empezar a vestir, la primera en hacerlo fue Mery, después lo haría yo.
Cuando terminó salió para enseñarme como iba, y la verdad es que me quede impresionada, iba muy guapa, llevaba un vestido azul por encima de la rodilla y unos tacones negros a juego con la torerita, según me había chivado Iván llevaría también la corbata como su vestido, la idea me hizo gracia.
Era mi turno, saqué con mucho cuidado el vestido de gasa de la bolsa y comprobé que estuviese perfecto, después de cerciorarme de que estaba en orden empecé a vestirme tranquilamente, sin prisas, tras ponerme el vestido, me puse los tacones que me había regalado Mery.
Me miré al espejo y pese a mi enorme barriga de prácticamente ocho meses, me sentí guapa.
Salí y Mery me dijo que iba muy guapa, vamos que solo la falto silvarme.
Eran las 11:15 así que decidimos irnos hacia la playa, la boda comenzaría a las doce y tardaríamos alrededor de media hora en llegar, pero las dos preferíamos llegar con tiempo.
Como llegamos con tiempo, fui a comprobar si todo estaba listo, y me encantó lo que vi, todo estaba tal y como me lo había imaginado, como en mi cuento de hadas, solo que esta vez no era un cuento, era real,
Tras comprobar todo volví al lugar donde estaba mi padre esperándome para llevarme al altar, estaba guapísimo con su traje, estuvimos un rato hablando, esperando que llegase la hora.
Y llegó, era la hora y todos los invitados se pusieron de pie a la espera de que yo entrase. Agarrada del brazo de mi padre inicié el camino con una sonrisa, el camino hacia él, hacia nuestra vida juntos

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Bueno queridos lectores, estos ultimos dias subi capitulo todos los días porque mañana me voy de vacaciones y no se si al sitio al que voy tendre wifi para subiros capitulos asi que os queria compensar subiendo mas seguidos, en caso de que tenga wifi subire dos a la semana seguramente y os avisare como hasta ahora pero si no tengo hasta el dia 13 no vuelvo asi que en cuanto pueda os compensare con varios capitulos.
Un beso y feliz verano 

sábado, 28 de julio de 2012

Capitulo 54: no es la típica despedida de soltera


Empezamos a preparar las cosas de la cena cuando uno grupo de chicos locos vinieron hacia nosotras, me di cuenta de que eran Pablo y sus amigos, ¡menudos locos! Pero ¿qué hacían aquí? ¿y su fiesta?
-Ola princesa – Pablo estaba detrás de mi, me giré y le di un beso, hacía mucho tiempo que no me llamaba princesa.
-Ola cariño ¿qué haceis aquí?
-Nada que Mery y mi hermana me chivaron que no querias despedida de soltera por que estas embarazada y eso y pues me contaron su plan de barbacoa en la playa y ya sabes que a mi la barbacoa me encanta y nos hemos apuntado, así no os aburrís ajajaj
-Pero cariño, tu tenías tu fiesta y a mi no me importa, iros y devertiros anda.
-No jaja en realidad no teníamos ninguna fiesta planeada era para que no sospechases nada, teníamos pensado venir aquí desde el principio así que, ademas no me fío de que estas locas no preparasen nada mas ajajajaja
-Jajaja que tonti eres, pero en serio me siento mal, porque tu deberías estar disfrutando de tu despedida de soltero, en tu fiesta.
-Pero no, seguro que me lo paso mejor aquí, junto a ti, ya lo veras, no te sientas culpable porque no tienes por que.
-Te quiero
-Y yo
Esta sorpresa si que no me la esperaba para nada, ahora entendía porque había tanta comida, pero aun así me sentía un poco culpable, Pablo había sacrificado su despedida de soltero para venir allí y estar junto a mi. Estuvimos toda la noche juntos, muy pendientes el uno del otro, sin separarnos.
Me reí muchísimo y me lo pasé estupendamente, la verdad era que no pensaba que me lo iba a pasar tan bien, los chicos no paraban de hacer bromas y seguro que algún que otro amor salía de allí.
Terminamos la fiesta sobre las seis de la mañana y nos fuimos todos a descansar, mañana sería el gran día y teníamos que estar descansados.
No había sido una despedida de soltera como es habitual, pero me lo habia pasado de miedo, seguro que me había divertido tanto o mas que si me hubiesen dado una despedida de soltera típica.
Dormí del tirón, para mi sorpresa no me había levantado en medio de la noche como solía ser típico desde que estaba embarazada.
Nos despertamos sobre las seis de la tarde así que hicimos una merienda-cena y salimos un rato a dar un paseo por la playa para que nos diese el aire, nuestro último paseo antes de ser marido y mujer.
Yo me acosté pronto, ya que al día siguiente tenía cita con la peluquera a las seis de la mañana y quería estar descansada y no llegar a la boda con cara de dormida, Pablo se quedó viendo la televisión.

viernes, 27 de julio de 2012

Capitulo 53: todos los preparativos


-Vaya ha sido un fin de semana maravilloso
-La verdad es que si y Sofia se lo ha pasado genial ajajaj
-Si ajajaj, pero no creo que tu te quejes y te hayas aburrido mucho ajajaj. Vaya dos jaja conspirando contra mi.
-Jajaja y lo bien que nos lo hemos pasado ¿qué?
-Eso es verdad jajaja, pero os la tengo guardada, eso no se me olvida.
Al día siguiente fuimos a la iglesia para comprobar si había algún cura disponible para casarnos, ya que noviembre estaba a la vuelta de la esquina. Al final conseguimos uno pero para finales de octubre, en fin nos daba lo mismo principios de noviembre que finales de octubre, la fecha disponible era el 31, 31 de octubre, una fecha que ya no olvidaría nunca.
Las siguientes semanas pasaron volando, las revisiones del medico y los preparativos de la boda, sobre todo ocupaban la mayor parte de nuestro tiempo.
Aunque todo fuese muy deprisa contaba con la ayuda de Pablo, de su madre, de la mía, de su hermana, en fin que no estaba sola, todos ayudaban muchísimo, y gracias a ellos todo resultaba mas sencillo.
Pablo me acompañaba a todas las revisiones del médico, desde que había acudido conmigo a aquella ecografía no se había perdido ni una consulta al médico, y en las ecografias disfrutaba como nunca viendo a su pequeña. Me ayudaba mucho con todo lo que podía de la boda, aunque claro, también estaba su trabajo y yo no quería que lo descuidase por ayudarme con los preparativos.
En estos días hicimos muchas cosas, no solo todo giraba en torno a la boda y a nuestra hija, también quedábamos con amigos, acudíamos a la playa a pasear, terminamos de dar los últimos retoques a la casa y incluso algún que otro día fuimos con Sofia y sus padres al zoo, al parque de atracciones de aquí de Málaga y ella disfrutó muchísimo, daba gusto ver a la pequeña tan feliz.
Y así sin darnos cuenta llegó el día de nuestras respectivas despedidas de solteros, habíamos decidido hacerlas dos días antes de la boda.
Ambas eran a la misma hora, paro con una diferencia la de Pablo sería una despedida de soltero típica, organizada por sus amigos, sin embargo a mis amigas las había dicho que no quería nada de lo que se hace tipicamente, que tan solo una cena, ya que estaba de casi 8 meses y no podríamos hacer gran cosa, ellas lo entendieron y me hicieron caso, pero me pusieron una condición, que cuando mi hija naciese y ya estuviese en condiciones aceptables haríamos una despedida de soltera en toda regla y yo no tuve mas remedio que aceptar.
A Pablo fue al primero que vinieron a buscar, estaba segura de que le habían preparado una buena fiesta, y seguro que se lo pasaba genial.
Después llegaron Mery y Casilda a por mi, abajo estaban todas mis amigas, incluso aquellas de Madrid que venían solo para la boda y hacia mucho tiempo que no veía, eso me llenó de alegría, también algunas alboranistas que había conocido por internet venían de muchos sitios de España, y verlas me hizo feliz.
Ellas hicieron caso a mi petición de hacer una simple cena en su compañía y me llevaron a la playa, aunque hacía un poco de frío, habían preparado una hoguera para estar calientes, también habían traído comida, demasiada comida para mi parecer, habían pensado en hacer una barbacoa en la playa, eso si que no me lo esperaba.

miércoles, 25 de julio de 2012

Capitulo 52: como un chiquillo


Tras acabar de comer la pequeña Sofia vino hacia mi.
-Tita Cris ¿vienes a bañarte ya conmigo? Que he comido bien, por fa
-Jajaja sisi has comido muy bien, venga cariño vamos a ponernos el bañador.
Nos subimos las dos, empecé a ponerla el bañador y mientras me dijo.
-¿sabes que tita?
-El que cariño
-Que quiero que nazca ya Mia
-Yo también quiero cariño, pero todavía queda un poquito.
-Ya me lo ha dicho mamá, yo la voy a cuidar mucho ¿vale tita?
-Jajaja, seguro que si cariño, ya verás que bien os lo pasaís juntas.
-Si jajajaj ¿tu crees que la caeré bien?
-¡Claro que si cariño! ¿por que no la ibas a caer bien?
-No sé
-Seguro que si la caes genial, ya verás, cariño venga vamos a por mi bañador a la otra habitación.
-Vale
Se bajo de un salto de la cama y fuimos a la habitación en la que dormiríamos Pablo y yo, cogí el bañador y me lo puse después entré al baño para hacerme una coleta y al salir Pablo me dió un buen susto.
-¿Ves Sofi? Te dije que tu tía se asusta en seguida jajajaja
-Es verdad jajaja, se ha dado un buen susto jajaja
-¿Ah si? ¿así que tu lo sabías Sofi y no me has avisado? Muy bonito, pues ahora no me baño – fingí estar enfadada y me dirigí hacia la puerta.
-Venga Sofi el plan B – oí a Pablo que le decía aquello y no me pareció buena señal.
-¡Vamos! - la pequeña dio el grito de guerra.
-¿Qué? - entonces me giré y vi como venían los dos a por mi, yo sabía lo que estaban pensando e intente uir, pero fue imposible, ya que no podia correr mucho. Ambos empezaron ha hacerme cosquillas y acabamos en el suelo – ay ay por favor, parar , ajajaj por favor ajajaja
-No, no, te tienes que bañar conmigo – la pequeñaja había aprendido rápido de su tío y ahora ella me chantajeaba.
-¡Eh! Y conmigo que yo también me baño
-Jajaja vale jajaja, me baño con vosotros ajajajaj, lo juro ajajajaj
Entonces por fin conseguí que parasen, me dolía todo de lo que había reido con las cosquillas, Pablo me ayudó a levantarme del suelo y Sofia y yo esperamos a que se cambiase.
-Formamos un buen equipo eh Sofi, jajaja
-Si si tito - se acercó a pablo y le dijo – aunque la tita me daba penita
jajaja
-Sisis pero tu no te preocupes que en el fondo se lo ha pasado bien ajaja
-Sisi me lo he pasado genial jajajaj, menudo dolor de tripa tengo por vuestra culpa, pero esta os la guardo que lo sepaís.
-sisi te esperaremos jajaa
Llegamos a la piscina y yo decidí sentarme un rato en el bordillo antes de meterme, entonces Pablo, tan niño como siempre, se tiró de bomba y me empapó por completo.
-Vamos Sofi te toca.
-Voooooyy – entonces la niña se tiró imitando a su tio
-Pero bueno ¿la habeís tomado contra mi?
-¿Nosotros ? Que va
-Si nosotros somos muy buenos tita.
-Si unos angelitos sois, menudo peligro teneis vosotros dos juntos
Ya que estaba empapada decidí meterme al agua, estuvimos un rato y después subimos a ducharnos y arreglarnos un poco para la cena.
Cenamos tranquilamente y después mis padres y los de Pablo se quedaron hablando mientras los demás fuimos a dar una vuelta.
No nos entretuvimos mucho por ahi, ya que Sofia estaba cansada, era normal, por el viaje y la tarde de piscina.
El domingo fue tranquilo, no hicimos gran cosa y se nos pasó el día volando.
La verdad es que había sido un fin de semana increíble, todos habían congeniado en seguida y se llevaban bastante bien y de echo todos queríamos repetir, y lo dijimos que mas adelante deberíamos repetir un fin de semana juntos.
Regresamos a casa tras las despedidas.

lunes, 23 de julio de 2012

Capitulo 51: mudanza y fin de semana juntos


Nos despertamos juntos y desayunamos tostadas.
Nada mas terminar de desayunar y de fregar los platos, Pablo y yo nos pusimos a empaquetar las cosas hasta que Iván y Mery llegasen para ayudarnos, lo cual, fue a la media hora de empezar.
Iván y Pablo empezaron a llevarse los muebles que nos servían mientras que Mery y yo íbamos empaquetando todas las cosas.
La mañana pasó en seguida y la mudanza avanzaba estupendamente, comimos los cuatro en casa, en nuestra vieja casa, y decansamos una horita después volvimos al trabajo.
Sobre las 8:30 la mudanza estaba terminada, así que Mery y yo nos fuimos con Pablo e Iván, yo me quedé la última para cerrar la casa, no pude evitar quedarme en la puerta, sin cerrarla, en aquella casa que guardaba tantos recuerdos bonitos ya no seria “nuestra casa”, tenía un poco de melancolía por dejarla pero aun así era feliz.
-Para mi también tiene muchos recuerdos – Pablo se había acercado a mi oido
-Es que son tantas cosas las que hemos vivido en esta casa
-Eso es cierto amor, y esos siempre estarán ahí, pero ahora abrimos una puerta nueva de cara al futuro, a nuevos recuerdos que seguro que serán maravillosos, y serán en familia
-Tienes razón, venga vamos.
Y así cerramos la puerta de aquella casa, dejando en ella muchos de los mejores recuerdos, pero como decía Pablo ahora venían grandes momentos por vivir junto a mi familia.
Al llegar pedimos unas pizzas y cenamos los cuatro juntos en nuestro nuevo hogar
Estuvimos hasta las 12:00 mas o menos ya que los cuatro estábamos cansados, había sido un día duro de trabajo, sobre todo para los chicos, asi que queríamos descansar
Al día siguiente metimos algo de ropa en una maleta y tras desayunar y recoger un poco la cocina nos dirigimos hacia la parcela de mis padres en Cádiz, donde pasaríamos el fin de semana las dos familias.
Cuando llegamos saludamos a mis padres y a mi hermano el cual había venido con su novia, dejamos la maleta en nuestra habitación y al cavo de unos veinte minutos llegó la familia de Pablo, tras hacer las presentaciones, mostramos las habitaciones y dejamos que se acomodaran.
Antes de comer estuvimos todos charlando un rato en el jardín, como había piscina la pequeña estaba como loca por bañarse y le prometimos que si comía bien después me bañaría con ella.
Mi madre y la de Pablo fueron las que decidieron hacer la comida y os demás nos quedamos hablando.
La verdad es que fue una charla muy agradable, nuestros padres compartían ideas y eso hacia que no hubiese discusiones.
-Bueno Cris ¿te gustó la nueva casa? - me preguntó Casilda
-¡Ah! ¿tú también lo sabías?
-Jajaja
-Y yo
-Yo también
-Mm me parece que yo también
-Vale, lo he pillado, lo sabías todos menos yo ¿no?
-Eso parece cuñadita ajajaja
-Bueno que se le va a hacer ajajaja, pues la casa me encantó, es tan no se como explicarlo, se parece mucho a la casa que siempre había imaginado, y ya cuando Pablo me enseñó el cuarto de Mia fue increíble
No se como lo hace, pero Pablo siempre acierta con cada cosa que hace
-Jajaja que bien, me alegro mucho de que te gustase ajaja, Pablo estaba muy preocupado, no sabia si te iba a gustar ajaja
-Ya ves tú, dudas estúpidas de este hombrecito, porque ¿a quién no le iba a gustar?
-Chicos ya esta la comida – era mi madre avisándonos.
Fuimos a la mesa del salón, ya que era la mas grande y donde mas a gusto estaríamos comiendo.
Según Elena y mi madre como había sido mi cumpleaños y no lo habíamos celebrado, habían preparado una fuente de canelones, que por cierto encantó a todos, y después trajeron una tarta de chocolate.

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Bueno este capitulo se lo quiero dedicar a una personita especial para mi, Lucia Vidal, que se que en estos momentos no es que lo este pasando muy bien pero es una gran persona y no la quiero ver sufrir nunca asi que cariño ya sabes que tienes aqui a una amiga que te apoya y esta para lo que sea.
Besotes 

viernes, 20 de julio de 2012

Capitulo 50: sorpresa


Cuando bajamos me sorprendí de que no comiésemos en nuestro habitual restaurante que estaba cerca de casa, al contrario, Pablo se empeñó en coger el coche e ir a otro sitio.
Fuimos a Nerja y una vez allí Pablo aparcó y fuimos hacia el restaurante.
Nerja era un lugar que siempre me había gustado de Málaga, de echo recordaba que la primera vez que había ido a Málaga fue cuando era mas pequeña y fui de vacaciones y me fui allí a Nerja.
Yo me dejaba guiar por Pablo porque no tenía ni la mas mínima idea de adonde quería ir, entonces él se paró.
-¿Qué pasa cielo ? ¿nos hemos perdido?
-No jajaaj es que te tengo que vendar los ojos.
-Pero ¿por qué?
-Porque es una sorpresa, venga tonta fiate de mi.
-ajajaj que remedio.
Entonces Pablo sacó de su pantalón uno de sus pañuelos y me vendó los ojos, andamos un rato mas y se supone que llegamos, aunque no estaba segura de que fuese a un restaurante, ya que no había mucho bullicio como suele ser habitual en los restaurantes y además oía unas llaves.
Volvimos a andar pero esta vez fueron tan solo unos pasos y cuando nos detuvimos Pablo me susurró al oido “Feliz Cumpleaños mi vida” y me quitó la venda de los ojos.
No me lo podía creer, menuda sorpresa me había dado, y yo pensando que no se había acordado, inmediatamente le abracé y le besé.
-Muchas gracias amor – tenía los ojos llorosos.
-Seguro pensabas que me había olvidado.
-Jejej pues si, pero Dios Pablo es genial, desde luego olvidarte lo que se dice olvidarte no te has olvidado, esto no me lo esperaba para nada.
-Bueno es que como bien sabes mi casa es pequeña y ahora que va a haber una personita mas con nosotros, no entrábamos todos en la casa y sabía que tu siempre has querido una casa cerca de la playa así que a partir de ahora esta será nuestra casa.
Era increíble, Pablo había comprado una casa de dos plantas al lado de la playa con un jardín muy grande con piscina por mi cumpleaños, la había decorado estupendamente y me moría de ganas por ver la casa entera, ya que me había quedado en la entrada, todo era perfecto y pude ver por una de las ventanas que en el jardín había una mesa con velas, lista para comer en ella.
Estaba muy emocionada ya que este regalo no me lo esperaba para nada, bueno no me esperaba nada pero ¿una casa? No se me había pasado por la cabeza, era maravillosa, se parecía mucho a la casa que siempre había deseado tener.
-Cariño no me llores.
-Es.. q.. que.. es .. ta..an boni..to, te quiero mucho de verdad amor.
-Jajaja yo también te quiero, pero aun queda una cosa, no has visto la casa entera ajajaja, ven.
Me cogió de la mano y fuimos hasta una puerta que estaba cerrada, Pablo giró el manillar y me dejo ver.
En ese momento si que no pude contenerme ni una lagrima y estas empezaron a brotar por mi cara, era una habitación color lila, con una cuna, un cambiador, una mecedora, un carrito de paseo y muchas cosas mas listas para Mia
-Te amo – fueron las únicas palabras que conseguí decir entre la emoción, Pablo tenía una sonrisa permanente en su cara, satisfecho de haber acertado con su regalo.
-Yo si que te amo.
Estaba segura de que aquel era uno de los mejores cumpleaños que había tenido hasta la fecha, me había dado una buena sorpresa, no me lo esperaba para nada, con la casa ya me había quedado muy sorprendida pero la habitación había sido demasiado.
Después de haber recorrido toda la casa, fuimos al jardín, este era enorme y como había dicho antes tenía una piscina también bastante maja, nos sentamos en la mesa y empezamos a comer. Hasta la comida era perfecta, eran canelones, Pablo había pensado en todo, hasta en los mas pequeños detalles.
Cuando terminamos de comer, recogimos todo y nos sentamos en una amaca a la sombra en el jardín.
-Cariño, mañana vamos a empezar la mudanza le pedí ayuda a Iván ¿te parece?
-Si ajajaj, me parece muy bien, yo me quedare empaquetando las cosas en la otra casa.
-Me parece genial. Entonces ¿te ha gustado mi sorpresa?
-¿que si me ha gustado? ¿De verdad me lo preguntas? Pues claro que si cariño, además no me lo esperaba para nada jajaja
-Entonces misión cumplida.
-Desde luego
El resto del día lo pasamos allí en nuestra nueva casa, Pablo había preparado la piscina y había traído los bañadores, así que nos dimos algún que otro chapuzón, luego un paseo por la playa y después volvimos a nuestra otra casa.
El día había sido intenso y nos quedamos dormidos pronto.

jueves, 19 de julio de 2012

Capitulo 49: ¿se acordaria?


Nos quedaban dos días en Paris que disfrutamos al máximo, haciendo fotos en cualquier rincón, riéndonos, amándonos, comprando recuerdos y haciendo planes de futuro, de nuestro futuro juntos.
Decidimos que cuando llegásemos le daríamos la nueva noticia a nuestras familias y tanto Pablo como yo decidimos casarnos antes de diciembre que era cuando salía de cuentas.
Nos queríamos casar o a finales de octubre o principios de noviembre, y habíamos pensado casarnos en una playa, teníamos todo medio planeado y así, entre planes de boda, nos encontramos de vuelta a Málaga.
Yo llamé a mis padres y les conté la noticia por teléfono ya que ellos estaban en Madrid, no se la esperaban para nada pero aun así se alegraron mucho, sabían que era feliz y aquello bastaba para que ellos estuviesen contentos.
Cuando se lo contamos a los padres y hermanos de Pablo la felicidad fue increíble, todos se alegraron muchísimo y nos dieron la enhorabuena, aunque nos decían que sabían que pasaría antes o después porque se veía a leguas que estábamos echos el uno para le otro.
Escuchar todas esas cosas me llenaban de alegría, sabía que Pablo era el hombre perfecto para mi y no lo dejaría marchar.
Mis padres habían propuesto una idea que me apreció maravillosa, y fue que como ellos tenían una parcela bastante grande en Cádiz, para que se conociesen las dos familias, nos propusieron ir a pasar un fin de semana todos juntos a la parcela, y asi ambas familias se conocerían antes de la boda.
Otra de las personas que avisamos al poco de llegar fue a Mery, nuestra pequeñaja, la cual, se alegró enormemente y ofreció su ayuda para lo que necesitásemos, sin dudarlo un segundo.
Era la persona mas feliz del mundo, sabía que habíamos tenido nuestras discusiones y que la distancia alguna que otra vez nos había jugado malas pasadas, pero ¿qué pareja no discute nunca? Lo importante era que nos queríamos y no tenia ninguna duda de que eso era así, confiaba plenamente en Pablo y en apenas un año le había dado un giro de 360º a mi vida, sabía que no era demasiado tiempo, normalmente las parejas estaban de novios varios años y luego decidían casarse, pero nosotros no nos considerábamos una pareja corriente y en menos de un año nos conocíamos mucho mas de lo que creíamos.
Era 24 de septiembre por la noche y yo no podía dormir, ya que pese a la fecha hacia mucho calor.
El día siguiente era 25, mi cumpleaños, y en casa no habíamos hablado nada respecto al tema, ¿se acordaría Pablo de mi cumpleaños? No estaba segura pero tampoco es que me importase demasiado, con solo pasar el día a su lado me conformaba.
Nos despertamos a la vez y Pablo no me felicitó, bueno seguramente no se acordaría.
Ese día por la mañana había quedado con Mery, para buscar un vestido blanco, que me pegase para casarme en la playa, pero que no fuese el típico vestido de novia, entre otras cosas porque con mi enorme tripa no me valdría ninguno.
Mery si se acordó de mi cumpleaños y me regaló un álbum lleno de fotos nuestras, con Pablo, solo mías, con amigos, en fin, fotos increíbles tras las cuales había momentos que no querría olvidar, había fotos incluso que no sabían ni que existían.
También me regaló unos tacones blancos, preciosos de cuña.
-Son por si te los quieres poner el día de la boda.
-Son preciosos cariño, pero no se si los aguantaré
-La chica de la tienda me dijo que son muy cómodos y que no se te cansan los pies, pero como tu veas.
-Pues entonces no se hable más me los pondré. Muchas gracias amor.
-Bah, no se merecen
Estuvimos toda la mañana mirando tiendas y finalmente encontré el vestido perfecto: era de un blanco roto, hasta las rodilla, de gasa, ajustado en el pecho con palabra de honor y luego suelto hasta las rodillas.
Me gustaba como me quedaba además por la forma del vestido no marcaba demasiado y no parecía que tenía tanta tripa de embarazada, me lo probé con los tacones y la verdad es que quedaban genial.
Llegué a casa y Pablo no estaba, me vino genial para guardar el vestido y los tacones sin que los viese.
Cuando ya los había guardado decidí tumbarme un rato en el sofá ya que no habíamos parado en toda la mañana. Me puse a leer y sin darme cuenta acabé en mis pensamientos, y fue entonces cuando me di cuenta de que la casa de Pablo tan solo tenía una habitación y que cuando llegase la pequeña Mia no entraríamos todos allí, estaba sumida en mis pensamientos cuando Pablo entró, yo me di cuenta porque me saludo.
-Ola amor
-Ola cielo, ¿que tal?
-Muy bien estuve haciendo unas cosas con Lolo y ¿tu con Mery?
-Muy bien ajajaja de tiendas hemos estado.
-Que peligro teneís ajajaj ¿habeís comprado mucho?
-Que va ajajaj miramos mucho pero no compramos casi nada.
-Jajaj ¿tienes hambre cielo?
-Un poquito si jajaja
-Pues venga, pero hoy comemos fuera, que me apetece salir ¿te parece bien?
-Vale cielo, voy a por el bolso y nos vamos

lunes, 16 de julio de 2012

capitulo 48: claro que si


Tras dar una paseo terminamos prácticamente debajo de la torre Eifiel, yo estuve un momento mirando hacia arriba, asombrada ante aquel monumento, cuando baje mi mirada comprobé que Pablo estaba de rodillas en el suelo, mirándome con unos ojos que reflejaban ilusión, amor, esperanza y amor, al verle asi se me aceleró el pulso.
Vi como se llevó la mano a su chaqueta y sacó una cajita, la abrió dentro había un anillo precioso, lo sacó y lo colocó en mi dedo.
-Cristina Pérez Fernández, has echo que estos meses a tu lado sean los mejores de mi vida, me he dado cuenta de que eres la última pieza que necesito para acabar mi puzle, el puzle de mi vida, no puedo vivir sin ti y quiero que estés junto a mi para siempre.
¿Te quieres casar conmigo?
-¡Claro que si amor mio! - él se levantó con los ojos brillantes me abrazó y le besé-
-Me acabas de hacer el hombre mas feliz del mundo.
-Y tu ami la mujer mas feliz que se pueda imaginar ¿qué te crees? Te amo.
-Y yo a ti
-He de decir que esto no me lo esperaba para nada.
-jajaja, ese era el plan.
-¿Para esto querías venir a París verdad?
-Claro jajaja, en Málaga no te lo podía pedir bajo la torre Eifiel.
-Cierto jajajaj ¿sabes qué?
-Que
-Que es verdad que hoy ha sido un gran día y todavía no ha acabado.
-Cierto jajajaj
Volvimos al hotel y pasamos la noche entre besos, caricias, palabras de amor... y así fue como terminó el mejor día de mi vida.
Me desperté en mitad de la noche con vómitos, salí al balcón a qu eme diese el aire y me sentí mucho mejor.
Empecé a analizar lo que había pasado esa noche, la mejor noche de toda mi vida, lo decía completamente segura, lo sabía, no había vivido otra noche mejor que aquella ¡Dios mio me iba a casar! Y con la mejor persona que podía existir, con aquella que habia llenado todo mi mundo con su sola presencia.
No podía dejar de sonreir, desde el momento en el que Pablo me habia dicho “¿Te quieres casar conmigo?” una sonrisa se grabó en mi cara. ¿Podia pedir algo mas? Me iba a casar con Pablo y tendriamos una niña juntos.
Cuando me sentí mucho mejor y mi tripa volvió a la normalidad me metí en la cama con el mayor cuidado para no despertar a Pablo.
-¿donde estabas amor?
-Ains te he despertado, lo siento mucho, es que me han dado naúseas y después salí al balcón hasta que se me paso.
-¿Estas bien ya?
-Si si no te preocupes amor
-Jajajaj yo pensaba que te iba a pasar como en aquel libro “perdona pero quiero casarme contigo” cuando Niki se come la cabeza por la noche
-Jajajaj no amor, yo estoy segura de mi elección y no tengo miedo quiero estar siempre contigo, no me echaré atrás eso te lo puedo asegurar, espero que el se echa atrás no seas tu jajajaj
-Eso es imposible.
-Descansa amor
Le di un beso y nos volvimos a dormir.




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Bueno este capitulo se lo dedico a mi princesa @angela_cfm que hoy es su cumple y como no la puedo regalar nada la dedico un capitulo, que te quiero mucho amor que lo disfrutes y espero que te guste
TEeequiieirooo
FELICIDADEEEES

capitulo 47: hoy sera un gran día


A la mañana siguiente me despertó la mejor melodía de todas, la de Pablo, estaba sentado en el borde de la cama con su guitarra.
-Quiero perderme contigo
en tus sábanas frías
olvidando el mundo, sin nadie
que sepa que estamos aquí
quiero enterrar el pasado
y creer que eres mia
y que en tus sueños
perdida te acerques y
quieras vivir junto a mi
por eso te digo bajito
que doy lo que sea por
un minuto contigo
por eso te canto al oido
mi secreto cautivo
sin miedo a decirlo
yo te quiero
y no puedo vivir sin
sentir en mi cuello tu aliento
no soy uno mas en tu lista
de amores perdidos
preso de tus largos besos
eterna paciencia que
tienes conmigo
yo se
que puedo sentir en el aire
ese algo que dejas
que embruja mi cuerpo
cuando te alejas
me tiemblan las manos
por miedo a que veas
que muero por ti
has volcado mi universo y
con un solo beso has parado mi tiempo
canta por dentro
un corazon que
late muy lento
cuando estoy sin ti
creo que empiezo a notarlo
acaricias mis labios
calmas mi sed
apaga la luz
que te bese otra vez
Buenos días princesa
-Buenos días mi rey ¿y esto?
-Te dije que hoy sería un gran día
-Pues desde luego ha empezado muy bien
-Venga dormilona, que ya está el desayuno
-De acuerdo, en seguida voy
Desayunamos y nos vestimos, decidimos dar un paseo por París sin rumbo fijo, ya que dicen que solo cuando te pierdes es cuando conoces los rincones mas bonitos de algún lugar.
Estuvimos todo el día perdidos, recorriendo los rincones mas bellos de París y supimos regresar al hotel gracias a las indicaciones de un parisino, ya que nos habíamos perdido completamente.
Decidimos cenar en la habitación, ya que a mi no me apetecía encontrarme con cierta persona.
Además el salón de nuestra habitación tenía al igual que el anterior hotel en el que estuvimos, vistas a la torre Eifiel que tanto adoraba.
Cuando terminamos de cenar Pablo me propuso un plan.
-¿Quieres que paseemos por los alrededores de la torre Eifiel?
-Vale, de noche es preciosa.
-Eso es verdad.
Salimos del hotel cogidos de la mano, como dice la canción “ sin miedo a decirlo, yo te quiero”, proclamando que estábamos enamorados, sin ocultarlo.

viernes, 13 de julio de 2012

Capitulo 46: ¡es una zorra!


Estuve viendo un rato la televisión y luego me metí en la cama aunque no conseguía conciliar el sueño, me había acostumbrado a dormir sintiendo el calor de Pablo al lado mía en la cama, a sentir sus brazos abrazándome, y a sus besos en mi cabeza antes de dormir, sin él en el otro lado de la cama no podía dormir.
Estaba tumbada en la cama, pensando en que estaría haciendo Pablo con Mónica en aquellos momentos cuando oí unas voces en el pasillo del hotel, una voz la conocía muy bien, era la de Pablo y la otra era la de Mónica.
-¿Cuál es tu habitación Mónica?
-Esta al final del pasillo ¿quieres venir?
-¡No! Mi habitación es esta y ahí dentro está Cristina esperándome, que por si no lo recuerdas es mi novia y la mujer a la que amo, no se ni como se te pasa por la cabeza hacerme semejante pregunta.
-Pero vamos Pablo, si solo es pasar un buen rato – yo nada mas oirles hablar me había levantado de la cama y estaba detrás de la puerta escuchando la conversación.
-He dicho que no Mónica, me parece que no lo entiendes, yo no quiero nada contigo, tan solo somos amigos.
-¿Ah si? Y si hago esto ¿qué?
Entonces abrí la puerta y vi como estaba besando a Pablo mientras él la intentaba separar, cuando por fin lo consiguió no me pude contener y la pegué un puñetazo en el centro de su bonita cara.
-¡No te vuelvas a acercar a el puta! - cogí la mano de Pablo y le metí dentro y antes de cerrar de un portazo la dije – sino habrá mas que un simple puñetazo en tu cara
Entré en la habitación hecha una furia, sabía que no era trigo limpio y se había pasado, había superado la linea.
Me dolía muchísimo la mano debido a la fuerza con qEsue le había dado el puñetazo a la zorra de Mónica, así que Pablo me trajo hielo e intentó que me calmase.
-No deberías haberla pegado cielo
-¿Ah no? Y que hago Pablo ¿la doy las gracias? ¡Que te ha besado!
-Ya lo sé cariño, pero con ese puñetazo solo has conseguido hacerte daño.
-Me da igual se lo merecía.
Si es que lo sabía
-¿El qué?
-Que no era trigo limpio, que venía con dobles intenciones y voy y te dejo solo con ella, justamente lo que había venido a buscar. Se lo he dejado blanco y en botella.
-Eh, la culpa ha sido mía por no haber venido contigo, como debería de haber echo.
-¡Es una zorra!
-Eso es verdad – no pude evitar reirme, y Pablo conmigo – venga cariño vámonos a la cama, mañana será un gran día.
-Espero que mejor que este, cada vez que venimos a París nos pasa algo malo
-Eso es verdad, pero también nos pasan mil cosas mejores.
Te amo con locura, eso no lo olvides nunca.
-Y yo a ti cariño
Nos metimos a la cama, y ahora que tenía a Pablo a mi lado me dormí en seguida, Pablo era para mi como el osito de peluche de los niños pequeños sin el cual no pueden dormir.

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Bueno este capitulo se lo queria dedicar a Lucia en twitter @LuciiaViidal porque es una gran persona y me encanta hablar con ella, todos sus mensajes y comentarios de apoyo que me hace me sacan siempre una sonrisa y la queria dar las gracias y como la dije, la dedicaria este capitulo, espero que te haya gustado corazon.
Un besote enorme Teeq

jueves, 12 de julio de 2012

Capitulo 45: Mónica


Al día siguiente habíamos quedado con Mery e Iván ya que este estaba con las clases de surf para Pablo.
Le conté a Mery que nos volvíamos a ir a Paris dentro de dos días y ella se alegró mucho, sabía al igual que Pablo que adoraba esa ciudad, y como siempre, se alegraba cada vez que me veía feliz.
Mery se quedaría en Málaga ya que no tenía pensado irse a ningún sitio de vacaciones, y me hizo prometerla que volvería a Málaga unos días antes de volver a Madrid.
No se lo negué, pero sería lo que había dicho ella solo unos días ya que estábamos en septiembre y quería estar en Madrid por si se me adelantaba el embarazo.
Los dos días se me hicieron un poco largos, ya que hacía muchísimo calor y no me apetecía moverme demasiado.
El día del viaje llegó, y nosotros llegamos con tiempo al aeropuerto y nos tocó esperar una media hora a nuestro avión, era una situación parecida a la que vivimos hace unos meses y no pude evitar sonreir.
-Me encanta cuando sonries
-Jajaja y a mí cuando lo haces tu
-Que tonta eres jajaja
-fijate es prácticamente la misma situación de hace unos meses.
-Si, es cierto ajajaj
Entonces la megafonía interrumpió nuestra conversación, estaban dando aviso para los pasajeros rumbo París.
Los asientos que había reservado Pablo eran al lado de la ventana, me encantaba, estaba atento a todo, cada detalle, él sabía que me gustaba viajar al lado de la ventana y estaba segura de que no había sido una casualidad que nuestros asientos fuesen esos.
Me quedé dormida durante el viaje y Pablo me tuvo que despertar al llegar.
Aunque había estado la otra vez en París, mi sensación era como si nunca hubiese estado allí, como si pisásemos aquellas calles parisinas por primera vez.
Fuimos a un hotel cercano al de la otra vez, pero de cinco estrellas en vez de cuatro, y fuimos hacia nuestra habitación; cuando entré comprobé que era enorme, y a decir verdad era como la habitación de mis sueños, era preciosa.
-Pablo es increíble, pero esto debe de ser carísimo.
-Ese es igual amor, con tal de verte feliz pago lo que haga falta. Además cuando vi esta habitación por internet supe que teníamos que venir aquí.
-De verdad era increíble, no sé como te las apañas pero haces que todo sea perfecto.
-Jajaja, ójala.
-Te lo digo en serio
-Anda, eso eres tú, que me ves con buenos ojos.
-Si seguro
Deshicimos las maletas y ese día nos quedamos en el hotel, el cual tenía piscina y fuimos un rato a refrescarnos, había poca gente y pudimos disfrutar de la tranquilidad.
Sobre las 8:00 subimos a cambiarnos y bajamos a cenar al hotel.
Cogimos una mesa cerca del ventanal que daba a la torre Eifiel, estábamos cenando tranquilamente cuando una chica alta, guapa con uno vestido y unos taconazos se acercó a nosotros.
-¡Pablo!
-¡Mónica!
¿Mónica? ¿había dicho Mónica? ¿la misma Mónica por la que me había dejado plantada cuando estaba embarazada? No podría ser y Pablo ¿por qué tenía esa gran sonrisa? ¿qué estaba ocurriendo?
-¿Qué tal estás?
-Pues muy bien, ah Cris cariño esta es Mónica
-Encantada – intenté sacar mi mejor sonrisa.
-Vaya por fin conozco a la famosa Cristina que ha robado el corazón de mi Pablo - ¿mi Pablo? ¿pero esta tía de que va? Dios mio, se había sentado en la mesa, no podía ser - ¿no os importa que os acompañe?
-Claro que no ¿verdad amor?
-No claro - ¡Pues claro que me importaba! No quería seguir viéndola la cara por Dios, menuda noche me esperaba.
Ahora me tocaría aguantar a la petarda esta toda la noche.
Ambos parecía que se lo estaban pasando genial, recordando viejos tiempos, y contándose batallitas, así que terminé mi cena y les dije.
-¿Me disculpais? Necesito que me de el aire.
Salí a la terraza sin esperar ninguna respuesta por parte de ninguno de los dos. La terraza estaba en la otra punta del restaurante y así no tendría que escuchar a ninguno de los dos, no pensaba aguantar ni un minuto mas en la compañía de esa tal Mónica.
La verdad es que probablemente mi comportamiento no era el mas acertado, era una novia celosa, pero es que sencillamente no podía aguantarla mas, era superior a mi.
Perdí la noción del tiempo mirando París desde aquella terraza, de repente miré el reloj y me di cuenta de que llevaba allí al rededor de cuarenta y cinco minutos.
-Cariño ¿te encuentras bien?
-Perfectamente – me salió un tono un poco irónico - ¿por qué lo dices?
-Porque has salido hace como tres cuartos de hora y no has vuelto a entrar.
-Pablo esa Mónica ¿es la misma Mónica por la que me dejastes hace unos meses?
-...Si...
-De acuerdo, pues la dices que no me encontraba bien y que me he subido a la habitación a descansar
-Pero ¿por qué te subes?
-Porque no la aguanto Pablo, no quiero seguir escuchando sus historias ni su horrible risa, no me da buena espina no me preguntes por qué porque no lo sé pero yo no me quedo.
Sube cuando quieras
-Cariño no te pongas así solo somos dos viejos amigos.
-He dicho que me voy pero tu quedate todo el tiempo que quieras.
Me fui, dejándole con la palabra en la boca,no estaba dispuesta a seguir allí, con ellos dos, en una conversación en la que yo no pintaba nada.