jueves, 31 de mayo de 2012

Capitulo 25: Pequeña sorpresa


Iba en el avión de vuelta a casa iba pensando en que me acababa de separar de Pablo y ya estaba planeando cuando lo volvería a ver.
Recordé que su cumpleaños era el mes que viene y le quería preparar algo especial ¿y si lo llevaba a Venecia? ¿O a Praga? ¿o a Roma? ¿y a los tres sitios?, el vuelo transcurrió pensando en los miles de posibles planes que podía tener para el cumpleaños de Pablo.
Al llegar a casa la note de nuevo vacía sin él, todo sin él se veía de otra manera.
Volví de nuevo a las clases, este era el último trimestre teórico, luego me quedarían las prácticas, a mis 24 años se podía decir que había aprovechado bastante bien mi vida, pero aún así siempre hay algunas cosas que te la pueden cambiar en el momento que menos te lo esperas.
Pasaron 6 semanas y decidí que ya no podía demorar mas la visita, debía ir al médico.
Desde que había vuelto de Málaga no me había bajado la regla al principio pensé que se me podía haber retrasado por algo, el extrés de los exámenes o cualquier cosa externa, pero ya no, me había echo varios test de los que venden en la farmacia y todos daban positivo, cuando reuní el valor suficiente acudí al médico y él me lo confirmó, estaba embarazada.
No se lo había dicho a nadie porque no quería alarmarles y además ni siquiera yo estaba segura, pero hoy el médico me lo había confirmado, aunque he de decir que la noticia me sentó como un jarro de agua fría, aunque en el fondo me esperaba esa respuesta, pero tenía miedo de como responderían los demás, en especial Pablo.
Empecé a echar cuentas y todo encajaba, aquella noche en el barco, inevitablemente se me escapó una sonrisa.
Quedaba una semana y pocos días para el cumpleaños de Pablo y quería decirle la noticia, pero pensé que lo mejor sería hacerlo en persona y no por teléfono, así que cada vez que hablaba con él no le daba ningún indicio que le llevase a pensar nada relacionado con esta pequeña sorpresa.
Pasé toda la semana ocupada preparando el cumpleaños, llamé a Lolo para asegurarme de los días que tenía Pablo libre y de cuando quería venir a Madrid, el me dijo que no tenían conciertos desde el 29 hasta el 7, y me chivó que Pablo me quería dar una sorpresa viniendo el 29 a verme.
Me vino perfecto para organizarlo todo, preparé un viaje por Venecia, Praga y Dublín, pasaríamos dos días en cada ciudad. También le compré un collar de plata que había visto que le encantaba en uno de los días que pasemos por Madrid.
El 29 llegó y Pablo vino a casa, yo me hice la sorprendida aunque no me costó mucho porque estaba en casa cuando llegué de la universidad.
-¡PABLO! - fui corriendo hacia él y me tiré a sus brazos.
-Yo también me alegro de verte amor jajajaja – nos caimos sobre el sofá
-Pero ¿cómo que estás aquí?
-Es que tenemos ahora unos días que no tenemos conciertos y me quedo contigo jajaaj
-Perfecto ajajaj. Dios como te he echado de menos - no pude evitar besarle, como le había echado de menos.
-Y yo a ti
Tras estar un rato hablando, contándonos esos pequeños detalles que se nos escapaban por teléfono, ayudé a Pablo a deshacer la maleta, no porque yo quisiese claro estaba, mañana la tendría que volver a hacer para irnos,pero él se había puesto cabezón.
Pedimos una pizza y no salimos de casa en toda la tarde, cenamos en la terraza ya que hacia muy buen tiempo y después Pablo quería ver una película y vimos “Perdona si te llamo amor”
Cuando la película terminó con el pretexto de ir al baño, fui a por los billetes de avión y se los entregué, no se los esperaba y le hizo mucha ilusión
-Feliz cumpleaños cariño
-De verdad, eres increíble, pero... ¿tú no tienes clases estos días?
-Si jajaja
-y ¿vas a faltar?
-Claro jajaj, no creo que me echen mucho de menos, te prefiero a ti jaajaj
-Te quiero
-Yo mas
-Vaya ahora tenemos que volver a hacer la maleta ajaja
-Claro yo te decía que la dejasen pero eres tan cabezón ajajaj
-Jajaja
Nos fuimos a la cama sobre la 1:30 de la mañana y nos dormimos en seguida.

viernes, 25 de mayo de 2012

Capítulo 24: maravillosa noche


No sabía si decirle a Mery o no que iba a ir para allá en semana santa, pero finalmente se lo tuve que decir ya que ella me dijo que pensaba venir a Madrid en vacaciones para verme. Cuando la dije que iba a ir yo para allá, se puso muy contenta y me regañó por no habérselo dicho antes.
El trimestre finalizó y saqué todo con muy buenas notas, ya que me había concentrado mucho en los estudios para no sentirme tan sola sin Pablo.
Pablo se alegró mucho cuando le dije que había sacado todo el trimestre muy bien y vino a casa, después nos fuimos rumbo Málaga, no sabía por que pero presentía que iba a pasar algo especial en este viaje.
Llegamos, dejamos las maletas en casa de Pablo y nos fuimos a casa de Mery. Todos nos alegramos mucho de volver a vernos.
Comimos los tres juntos y estuvimos toda la tarde juntos, contándonos todo lo que nos había pasado en este tiempo.
Nos tomamos la semana de relax y disfrutamos de cada momento al máximo, volvimos a recorrer los sitios de Málaga que eran importantes para los dos, quedamos con los amigos de Mery, vimos todas las procesiones que nos fueron posibles, y Pablo me presentó a su familia, yo estaba nerviosa pero se portaron genial conmigo y enseguida congeniamos, o al menos eso creía. Su familia era genial se veía que se llevaban genial entre todos y que tenían una complicidad que no todas las familias tenían.
Llegó el último día y yo volvía al día siguiente a Madrid, Pablo se quedaba en Málaga ya que era allí su próximo concierto.
El último día Pablo alquiló el yate de la otra vez y lo volvió a planear todo tal y como lo había echo la otra vez, con la diferencia de que está vez yo no me iría.
Era una noche tranquila y hacia calorcito así que se agradecía el frescor del mar.
Pablo me entregó una cajita, la abrí, contenía una pulsera muy sencilla y elegante que tenía los mismos grabados que la que yo le regalé en París.
-Quería que tú también tuvieses una y así no te olvides de mi
-Eso nunca va a pasar – había acabado sentada en sus rodillas
-¿El qué?
-Que me olvide de ti, te amo demasiado para que eso ocurra
-No se que haría sin ti, Te quiero.
Empecé a besarle como si estuviese falta de besos, cosa que no era cierta, Pablo no se hizo demasiado de rogar y me siguió el rollo. Estábamos en la cubierta del yate y poco a poco entre besos llenos de amor llegamos al camarote donde entre besos, caricias y mucha pasión pasamos la noche, Pablo había pensado en todo y había echo un corazón con pétalos en la cama, el cual no tardamos mucho en deshacer.
Cada vez que me hacía el amor, me transportaba a las nubes, me hacia rozar el cielo con los dedos.
Era el hombre de mi vida, cada día lo tenía mas claro, y no pensaba dejarlo escarpar jamás.
Otra vez teníamos que despedirnos sin saber cuando nos volveríamos a ver, se me volvió a hacer muy difícil, ya que encima también me despedía de Mery, sería una despedida doble, y si ya de por sí me costaba despedirme de tan solo una persona, de dos personas tan importantes sabía que me costaría mucho.
-¿Cuándo nos volveremos a ver Pablo?
-No lo sé princesa, en cuanto pueda.
-Te esperaré cada día de mi vida, te amo
-Te amo
Esta vez era yo la que se marchaba y dejaba a Pablo allí, pero los sentimientos era exactamente los mismos , cada vez me costaba mas separarme de él.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Capitulo 23: Galicia


No quería perder ni un minuto así que nada mas salí de la universidad fui a mi casa a por la maleta y me fui al aeropuerto dirección Galicia.
El viaje se me pasó en seguida y cuando me di cuenta estaba en la calle, a las puertas del hotel, miré hacia los balcones y ahí le vi, asomado al balcón con la mirada perdida en el horizonte.
CRIS: ¿Qué miras amor?
PABLO: ola princesa ¿Cómo?
CRIS: pues eso jajaja ¿que a donde mirabas tan concentrado desde el balcón?
PABLO: ¿Cómo sabes eso?
CRIS: Pues ¿tú qué crees?
PABLO: ¿Donde estás?
CRIS: mira hacia abajo
ÉL lo hizo y fue entonces cuando me vió, una sonrisa se dibujó en su rostro.
CRIS: ¿te importa si subo? :P
PABLO: Claro que no, ya estás tardando
Cuando llegué la puerta estaba ya abierta y me lancé a sus brazos, le había echado tanto de menos, no sabía como había aguantado tanto sin él.
-¿Cómo es que estas aquí amor?
-Nos dieron el viernes libre y no lo dudé ni un minuto
-Te he echado de menos
-Y yo Te quiero
-Y yo
Pablo tenía en su rostro el reflejo de la felicidad, un brillo en los ojos, una gran sonrisa, me encantaba verle así.
-Bueno me vas a decir en que pensabas jajaja
-Pues claro, estaba pensando en ti
-jajaja ¿ah si?
-Si ajja en cuando te volvería a ver
-Pues mira jajaja aquí me tienes, me he adelantado
-Como siempre
-Jajajaja
No salimos de la habitación en toda la tarde, estuvimos hablando de todo lo que nos había ocurrido en estos meses.
Pablo me contó anécdotas de su gira y lo mucho que disfrutaba en cada concierto, dándolo todo por sus fans, se veía que estaba haciendo realidad su sueño, no me podía haber perdonado nunca si no hubiese echo su gira por mi.
Yo tan solo quería que fuese feliz.
Recordé que estábamos a finales de marzo y que Pablo en abril cogía vacaciones.
-Pablo
-¿Si amor?
-En abril tienes vacaciones ¿verdad?
-Si jajaja
-¿que te parece si por semana santa nos vamos a Málaga? Se que adoras pasar la semana santa allí y no sabía que tenías pensado hacer
-Jajaja la verdad no lo había pensado, pero cualquier plan junto a ti me parece perfecto, de hecho me parece una idea genial.
Pero con una condición
-A ver ¿Cuál?
-Que esta vez te quedes en mi casa jajaja
-Trato echo jajaja
-Perfecto entonces
Ese punte en el que me había ido a ver a Pablo se me hizo demasiado corto, me llevó a su concierto y lo disfruté muchísimo, hacía mucho que no iba a un concierto suyo.
No hicimos gran cosa en los tres días, estábamos juntos a todas horas y paseábamos felices por Galicia.
Llegó el domingo y me tenía que marchar, Pablo me acompañó al aeropuerto, esta despedida no se me hizo tan difícil porque sabíamos que en dos semanas volveríamos a estar juntos, el vendría a Madrid a recogerme y juntos nos iríamos a Málaga.

viernes, 18 de mayo de 2012

Capítulo 22:despedida


Pasamos los dos últimos días juntos, antes de que cada uno siguiese con su sueño, mas enamorados que nunca, disfrutando cada momento como si fuese el último.
Yo empezaba las clases el lunes y el primer concierto de Pablo era el lunes en Barcelona, así que se tenía que marchar el domingo, el billete de avión lo sacó lo mas tarde que pudo, a las 10:00, para disfrutar al máximo el tiempo juntos.
Odiaba las despedidas pero quería acompañar a Pablo al aeropuerto, y llegó el momento de la despedida.
-No quiero que te vayas.
-Ni yo amor, pero tengo que hacerlo. Te prometo que me verás antes de lo que esperas.
-O tú a mi jajaj, en cuanto pueda iré a verte te lo juro – nos fundimos en un abrazo y entonces Pablo me cantó al oido.
-Yo no te olvidaré, siempre te querré
nada nos podrá separar jamás
dentro de mi, cuando me acuerde de ti
tu luz me guiará y me iluminará
Yo no te olvidaré
-Te amo – le di un beso entre un par de lágrimas, un beso dulce.
-Y yo
Entonces nos separamos, acababan de dar el último aviso para los pasajeros.
Me quedé allí plantada, sin moverme y viendo como se alejaba lo mas valioso de mi vida, antes de cruzar la última puerta Pablo se giró, dejo las maletas e hizo un corazón con sus manos mientras sonreía, yo le hice otro y le grite que lo amaba, después traspasó aquella puerta y me sentí sola.
El regreso a casa no fue excesivamente largo, pero cuando llegué sentí la casa tan vacía, sabía que el tiempo que estuviese sin él sería muy largo, pero iba a estar estudiando lo que me gustaba, y esperaba que aquello me ayudase y me mantuviese ocupada para no tener demasiado tiempo para pensar.
Las clases empezaron y volví a ver a todos mis amigos, ellos sabían que me había ido a Málaga y se habían enterado de que estaba con Pablo ya que mientras habíamos paseado por Málaga y Madrid, nos habían hecho fotos y salíamos en varias revistas del corazón. Ni Pablo ni yo habíamos caído en aquel detalle.
Les fuí contando todo lo que querían saber y se quedaron impresionados, la verdad es que la nuestra había sido una historia bonita y por que no decirlo, de película.
Así entre los estudios y mis amigos fue pasando el tiempo, cuando me di cuenta habían pasado ya dos meses.
Todos los días hablaba con Pablo ya fuese por teléfono, sms, whatsapp, skype, chat, etc...
En la universidad iban a darnos el viernes libre, con lo que sería como un puente de tres días si lo juntabas con el sábado y el domingo, en cuanto lo dijeron yo ya sabía que es lo que haría en esos tres días.
Esos días Pablo estaba en Galicia así que no lo dudé, iría a verle, no quería darle ninguna pista de que iba a ir pues quería que fuese una sorpresa así que llamé a Lolo para que me dijese el hotel y la habitación de Pablo.

--------------------------------------------------------------
Este capítulo me gustaría dedicároslo a todos vosotros, mis lectores, porque de verdad me animais a escribir a seguir con esta humilde historia creada por una principante, porque es mi primera historia y si os soy sincera nunca pense que fuese a gustar  y por ello os lo agradezco enormemente por vuestros mensajes en el blog, por twitter de verdad me hacen muy feliz y por ello os doy las gracias.
Siento si no subo muy a menudo pero estoy de exámenes y me quitan tiempo, de todos modos intentaré subir siempre que tenga un huequito
Mil besos

martes, 15 de mayo de 2012

Capitulo 21: No quiero que dejes tu sueño


Irremediablemente el día siguiente llegó y pronto estábamos de vuelta en Madrid, estábamos un poco cansados así que pasamos una tarde de las nuestras, abrazados en el sofá, viendo una película y comiendo palomitas.
No quería pensar en que me quedaban tan solo tres días antes de empezar las clases y que Pablo empezase su gira, me planteé varias veces el no volver a las clases y realizar la gira junto a Pablo, estaba dispuesta a dejarlo todo, a dejarlo todo por amor, por Pablo.
Tras pensarlo varias veces decidí que llamaría a mis padres para decírselo, ya que eran ellos los que me estaban pagando la carrera, para decirles que quería dejar la carrera.
Mis padres se negaron rotundamente y no había manera de hacerlos entrar en razón, de echo me advirtieron de que como abandonase la carrera estuviese atenta a las consecuencias.
-Pero papá ¿A ti que mas te da? Es mi vida.
-Te e dicho que no. No vas a dejar de estudiar lo que te gusta por irte con alguien con quien no sabes ni cuanto vas a durar.
-¡Eres un egoísta! Dejame cometer mis errores.
-Y tu eres tonta, que te crees ¿que siempre estareis juntos? no vas a echar a perder tu futuro.
No lo aguanté mas y colgué, habíamos acabado chillando y Pablo me había oido, yo estaba sentada en la cama cuando el llegó.
-¿Qué a pasado amor? ¿Con quien hablabas?
-Con mi padre – Pablo se sentó a mi lado
-Y... ¿por qué chillabas?
-Porque siempre tengo que hacer lo que él quiere y no lo aguanto
-¿Me lo quieres contar?
-Es que les he llamado para decirles que no quería volver a la carrera- Pablo puso cara de asombro sabía lo mucho que me gustaba la medicina y no entendía mi decisión.
-¿Y eso? Si te encanta
-Porque yo no puedo estar separada de ti, yo te necesito y me quiero ir contigo de gira.
-Yo tampoco puedo estar sin ti princesa, pero yo no quiero ni mucho menos, que dejes tu sueño por mi, no me parecería justo.
-Pero yo lo he decidido y es mi vida, ellos solo saben ponerse en mi contra.
-No amor, no se ponen en tu contra, solo hacen lo que creen que es mejor para ti.
-Ya pero me tienen que dejar cometer errores si me lo dan todo echo nunca voy a aprender nada de la vida, además a lo mejor el seguir la carrera no es lo mejor para mi. De todas maneras de igual, si me han dicho que no y les desobedezco me matarán, pero que sepas que no te vas a librar tan fácilmente de mi, en cuanto pueda te iré a ver.
-Y yo vendré a verte
-Te amo
-Y yo - se quedó por un momento pensativo - Princesa si quieres dejo la gira.
-¡NO! Eso nunca, no, no y no tu debes hacer la gira, y yo en cuanto pueda te iré a ver, pero nunca permitiría que abandonases tu sueño, nunca amor, y no puedes dejar plantadas a miles de personas que te adoran.
-¿Ves? Siempre piensas en los demás, tú si que puedes dejar tu sueño pero yo no puedo abandonar el mio
-Jajaja, soy así.
-Jajaja y así es como te quiero

viernes, 11 de mayo de 2012

Capitulo 20 : siempre tuyo


Fuimos dirección al Sena y allí había un barco esperándonos, subimos y fuimos a la parte delantera donde había una mesa preparada para dos, íbamos a cenar mientras navegábamos por el río.
La cena transcurrió tranquila entre risas y besos entonces Pablo me hizo levantarme de la mesa y nos acercamos a la barandilla, nos acercamos a un puente y de repente se iluminaron unas letras en él:
Te quiero mas que a mi vida, quiero estar
contigo siempre
Pablo “
Esas simples palabras que tantas veces había oído de su boca, me emocionaron una vez más, esos detalles me hacían sentir única, lo amaba mas que a cualquier cosa que me pudiese imaginar.
-Yo también quiero estar siempre contigo, te amo mas que a nada en esta vida
Nos fundimos en un gran beso, entonces Pablo me dió una carta.
-Leela tranquilamente
Se sentó en la mesa y yo me quedé allí de pies, dispuesta a leer la carta.
Ola mi princesa:
Te estarás preguntando que a que viene esta carta ahora, bueno pues para expresar lo que siento siempre se me ha dado mejor escribirlo así que aquí lo tienes, además así siempre lo podrás leer cuando quieras.
Quería darte las gracias ¿por qué? Te preguntarás porque te conozco :), por cada segundo que me regalas a tu lado, por cada minuto que me haces el hombre más feliz de la faz de la tierra, porque siempre me apoyas y me regalas tu sonrisa, porque aunque no lo creas cada gesto y detalle tuyo me hace sentirme afortunado y único.
Nunca había conocido a nadie como tú, y la verdad no creo que haya muchas personas como tú, eres única.
Todo empezó aquel día, en casa de Mery, el primer momento en que nuestras miradas se cruzaron supe que eras especial, y luego sonreíste y ahí fue cuando algo dentro de mi despertó, necesitaba conocerte poco a poco pero no sabía como decírtelo, y entonces me diste la excusa perfecta que querías conocer Málaga y ahí fue cuando aproveché, luego determinadas circunstancias hicieron que nos quedásemos solos y te pudiese conocer mejor.
Poco a poco me fui enamorando de ti, y no sabia como decírtelo porque tenía miedo de que tu no sintieses lo mismo por mi y entonces te besé, fue el beso mas especial de mi vida y cuando vi que me lo devolvías supe que sentías lo mismo.
¿El día que peor lo pase ? El de antes de marcharte, cuando te vi tan destrozada por mi culpa. Nena te hago una promesa la de no hacerte daño nunca, para no volver a verte así NUNCA.
En ese momento supe que debía luchar por ti, no rendirme y ¿no lo hice tan mal no?
Y ahora despertarme cada día a tu lado es lo que mayor felicidad me puede dar, tus detalles, tus besos,tus caricias, en definitiva a ti es lo que mas deseo.
Sé que ahora empiezo mi gira y tu tus clases y que eso significa que estaremos separados por una temporada, yo no te pediré que abandondes tu carrera por mi, no me parecería justo y no quiero que se te pase por la cabeza, pero si tú me lo pides yo dejo la gira, me quedo contigo y empiezo a estudiar otra carrera o retomo alguna de las que abandoné , para quedarme junto a ti que es lo único que quiero.
Quería que supieses todo lo que siento y que quiero pasar el resto de mi vida contigo, ya no me imagino mi vida de otra manera que no sea contigo.
Te amo y daría mi vida por ti sin dudarlo.
Siempre tuyo
Pablo
Cuando terminé de leer la carta, la doblé y una lágrima cayó por mi mejilla, me senté en las rodillas de Pablo y lo besé , con mas pasión que nunca, como si fuese el último beso, no quería alejarme de él nunca.
-Parece que te ha gustado.
-Te amo
-¿En serio?
-Pues claro.
Volví a mi sitio y seguimos disfrutando de la noche, una noche mágica e inolvidable, contándonos secretos y diciéndonos bajito que lo nuestro será eterno.

domingo, 6 de mayo de 2012

Capítulo 19: algo que te gustará


Al día siguiente fuimos a la Torre Eifiel y nos hicimos miles de fotos, una de ellas se la pedí a un hombre que pasaba por allí, nos la hizo con mi móvil y en ella salíamos besándonos y con la Torre Eifiel de fondo , inmediatamente me la puse de fondo a Pablo también le gustó y me hizo pasársela y se la puso también de fondo .
Fuimos a un pequeño pueblo cercano a París donde había un mercado artesano y decidimos comprar ahí todos los recuerdos para amigos y familia.
Yo mientras estábamos en Madrid había mandado grabar en una pulsera de plata nuestros nombre y por detrás “lo nuestro siempre será eterno” quería entregárselo a Pablo aquí en París y no encontraba el momento adecuado así que decidí que sería esa misma noche, mientras comíamos le dije a Pablo que tenía que ir al servicio y aproveché y llamé al hotel y les dije que quería que nos preparasen la mesa para cenar en la habitación, que lo pusiesen todo con velas y pétalos de rosas por la habitación, todo muy romántico.
La tarde fue muy tranquila y tampoco hicimos gran cosa que destacar, así que volvimos al hotel, cuando Pablo abrió la puerta de la habitación se quedó alucinado.
-¿y esto?
-Yo también se dar sorpresas jajaja, hoy cenamos aquí ¿te parece mi rey?
-Claro que sí.
-Te quiero
-Y yo
Nos sentamos y empezamos a cenar con la Torre Eifiel iluminada de fondo, era un lugar muy romántico para cenar.
-Menuda sorpresa me has dado, esto no me lo esperaba para nada.
-De eso se trataba jajaj, pero todavía hay otra cosa.
-¿Más?
-Sí, espérame un segundo.
Fuí a la habitación y dejé a Pablo terminando la tarta de chocolate que nos habían puesto de postre, cogí la cajita, cuidadosamente envuelta y aparecí por detrás de él.
-Toma amor
-¿Qué es?
-Ábrelo, espero que te guste.
Lo abrió con ganas y entusiasmo y cuando leyó lo que había grabado se emocionó, lo noté porque cuando se giró hacia mí había un brillo especial en sus ojos.
-¿te gusta?
-No
-¿No? Pues lo puedo descambiar por otra cosa que te guste
-Me encanta
-¡Vaya susto me has dado!
-Jajaja, en serio me encanta – entonces le di un beso
-Mmm beso con sabor a chocolate, con lo que me gusta el chocolate jajaja
-¿ah si?
-Si me vuelve loca – me acerqué a su oido y le susurré – loca de atar
Entonces sensualmente, provocándole me fui hacia la habitación, sabiendo que Pablo iba detrás mia.
A la mañana siguiente me levanté rodeada por sus musculosos brazos y apoyada en su torso desnudo, Pablo notó que me había despertado.
-Buenos días princesa – le di un dulce beso
-Buenos días amor ¿dónde quieres desayunar hoy?
-Donde la señorita desee.
-Pues aquí, abrazada a ti ¿te parece bien?
-Claro que sí, pide tú el desayuno que mientras me voy a duchar
-Vale ¿quieres algo en especial?
-No
La vi irse hacia la ducha desnudo, si es que era verdad que me volvía loca ¿y a quién no?
Pedí tortitas con nata y chocolate junto a un café con leche para Pablo y un colacao para mi.
Ese día nos íbamos a ir a visitar varios sitios, ya que Pablo se había informado y le habían dicho varios sitios que no nos podíamos ir sin visitar.
No paramos en todo el día y llegamos muy cansados bajamos a cenar al restaurante y nos fuimos a dormir, con la tristeza de que mañana era el último día allí.
Nuestro último día nos lo tomamos de relax, visitamos los campos Elíseos y la Torre Eifiel por segunda vez. Por la tarde dimos una vuelta e hicimos compras de última hora.
Fuimos al hotel a ducharnos, Pablo lo hizo primero y se vistió muy elegante así que yo al igual que él me arreglé.
-Guau tengo a la mujer mas guapa del mundo
-Y yo al hombre mas guapo del mundo. Te amo
-Y yo a ti. Venga vámonos que hoy no cenamos en el hotel
-¿ah no?
-No jajaj
-Uyuyuy ¿qué tienes preparado?
-Algo que creo que te gustará

viernes, 4 de mayo de 2012

Capítulo 18: primera noche movidita


A la mañana siguiente los dos nos despertamos a la vez, ya que habíamos puesto el despertador, desayunamos unas tostadas con zumo, nos pusimos ropa cómoda para el vuelo y nos fuimos al metro, ya que Pablo no se había traído el coche y el mio estaba en el taller.
Había poca gente y no tardamos mucho en facturar así que nos sobró alrededor de una hora que aprovechamos para ir a una cafetería; Pablo se pidió un café con leche y yo un colacao, ya que nunca bebía café.
El vuelo salió puntual y el viaje se nos hizo muy corto, y el hotel, no tenía palabras, Pablo había reservado una suitte enorme y preciosa que tenía vistas a la torre Eifiel desde la cama.
Llegamos, deshicimos las maletas y fuimos a dar nuestra primera vuelta por París,mientras andábamos Pablo iba con su brazo alrededor de mi cintura.
Sabíamos a donde ir porque en seguida Pablo preguntó que lugares nos recomendaban para visitar.
Pablo se defendía genial con el francés ya que su madre era francesa, había viajado varias veces a Francia, pero nunca a París, y me alegraba que hubiese decidido ir conmigo.
Decidimos que al día siguiente tranquilamente visitaríamos la Torre Eifiel y luego ya decidiríamos a donde mas ir.
Aquella noche cenamos en el restaurante del hotel, el cual era muy elegante, yo me había dejado el bolso en la habitación y quería el móvil para avisar a mi madre de que todo estaba bien ya que me había pedido que la avisase y se debía de estar subiendo por las paredes.
Dejé a Pablo en la mesa del restaurante y mientras traían la cena, subí a por el bolso.
Subí y cogí mi bolso rápidamente, salí de la habitación y de repente me encontré con él, era Óscar, el chico con el que había estado hace un año, el que me había usado para acabar con mi mejor amiga, la verdad es que no me apetecía verle la cara e hice como si no le hubiese visto, pero él sabía perfectamente que sí que le había visto.
-¿No me vas a saludar? ¿no sabes que eso es de mala educación?
-Vaya Óscar no te había visto ¿qué tal?
-Muy bien ¿y tú?
-Muy bien también, me quedaría a charlar pero tengo prisa, ya nos veremos.
-Cristina tenemos que hablar - Me iba siguiendo hacia el ascensor.
-No, no hay nada que hablar entre tú y yo, todo quedó muy claro.
-¿Quién es ese con el que estas?
-¿Y a ti que te importa? - entonces me cogió y me empujó contra la pared.
-¿Quién es?
-Que no te importa, métete en tu vida y déjame en paz – me estaba agarrando fuertemente los brazos – me haces daño.
-Cristina no hemos empezado con buen pie, yo te quiero perdóname por favor.
-No, ni hemos empezado con buen pie ni acabaremos bien Óscar, déjame yo no te quiero ni te voy a perdonar ¡SUÉLTAME!
-No lo entiendes
-No el que no lo entiendes eres tú, tuviste tu oportunidad, yo te quería y no lo supistes ver y ahora es tarde déjame.
-¡Que no! Tu te vas a venir conmigo
-Que me haces daño, déjame
-¡Suéltala hijo de puta! - Pablo acababa de aparecer y venía hacia nosotros.
-¿Quién es este? ¿este es con el que estas ahora?
-Déjame en paz de una vez por favor.
-¿No lo has oído? Que la sueltes
-Y si no lo hago ¿qué me vas a hacer? - en ese momento el puño de Pablo acabó en su cara y este calló al suelo.
-¿Estás bien? - yo asentí, Pablo llamó a la policía mientras me abrazaba – la policía ya viene, le pondremos una orden de alejamiento para que esto no vuelva a pasar.
-Vale
-Venga vamos, ¿sigues queriendo cenar?
-Si vamos, tengo hambre.
-Vale, venga ya nos podemos ir que por ahí viene el guarda de seguridad, él se quedará hasta que llegue la policía.
-Menos mal que has aparecido, no se que habría pasado si no llegas a venir.
-Es que tardabas mucho y me pareció raro ¿le conocías?
-Sí, ¿te acuerdas que te conté que hubo un chico que me utilizó y acabó con mi mejor amiga?
-Sí
-Pues ese era, ha cambiado mucho antes no era así.
-Bueno olvidemos el accidente este será mejor, que no nos arruine la noche.
-Si mejor
La cena transcurrió tranquila y antes de volver a la habitación pusimos la orden de alejamiento.
Dormimos abrazados el uno al otro.

martes, 1 de mayo de 2012

Capitulo 17: todo preparado para París


Entonces preparé la comida, unas albóndigas con patatas para comer y de postre una tarta de chocolate, esperaba que le gustase a Pablo.
Eran las tres de la tarde cuando acabé la comida y Pablo seguía durmiendo, así que decidí despertarle para comer, le empecé a cantar al oido.
-Regálame tu risa, enseñame a soñar
con solo una caricia me pierdo en este mar
regálame tu estrella la que ilumina esta noche
llena de paz y de armonía y te
entregaré mi vida
Abrió entonces los ojos y esbozó una sonrisa y yo seguí.
-Haces que mi cielo vuelva a tener ese azul
pintas de colores mis mañanas solo tú
navego entre las olas de tu voz y
tú y tú y tú y solamente tú
haces que mi alma se despierte con tú luz
tú y tú y tú
Le dí un beso y le dije.
-Venga corazón que la comida ya está lista
-Así da gusto despertarse jajaja
-Pues entonces te tendré que despertar así mas veces ¿
no?, venga tonti.
Me tumbó encima suya y me empezó a besar, que tontorrón se ponía a veces, la verdad es que me encantaba estar así y con él.
-Me quedaría así el resto de mi vida.
-Y yo - me volvió a besar – te quiero
-Y yo, mas que a mi vida.
Entonces le dejé para que se despejase un poco, se lavase la cara y se vistiese. Empezamos a comer y la verdad es que la comida estaba muy buena para no gustarme demasiado la cocina me había salido bien, y el postre estaba riquísimo y Pablo me lo agradeció.
-Mmm la tarta está muy buena
-Si jajaja me ha salido bastante bien teniendo en cuenta lo patosa que soy en la cocina jajaja
Recogimos la mesa entre los dos y metimos los platos en el lavavajillas.
-Pablo ¿te importa llamar a Mery y decirla que está todo solucionado y que nos vamos a Paris mientras preparo la maleta?
-Claro que no, ahora mismo la llamo.
Y así lo hizo, no sabía muy bien que meter en la maleta así que metí un poco de todo tanto ropa formal como informal, y en una hora y poco ya había terminado y al poco de acabar me llegó un sms de Mery:
-Pequeñaja me alegro de que todo se haya solucionado y vuelvas a estar feliz. Pásatelo genial en Paris y no hagas muchas locuras :P
Tequiero
Esta chica siempre estaba en todo, la adoraba.
Como había terminado antes de lo previsto le propuse a Pablo ir a dar una vuelta y cenar fuera a él le pareció buena idea y eso hicimos. Pablo se vistió con una camisa de rayas, unos pantalones negros y una chaqueta de lana acompañada de un fular, yo me decanté por unos pantalones cortos con unas medias debajo, una camiseta, unos tacones, un pañuelo y una chaqueta de lana.
-Dios mio hija, si es que si me vas así por la calle cualquiera se enamora de ti y sino es que esta ciego.
-¡Anda tonto! Venga vámonos anda
La tarde se nos pasó volando, fuimos al retiro y nos montamos en las barcas, luego dimos una vuelta por Madrid y decidimos cenar en un restaurante donde cenamos muy bien. Después dimos otro paseo por Madrid de noche, la verdad es que de noche tenía su encanto, era bonito. Finalmente volvimos a casa y nos fuimos directos a la cama ya que el avión de mañana salía a las diez y entre que teníamos que estar dos horas antes para facturar y lo que tardásemos en llegar nos teníamos que levantar sobre las 6:00 o 6:30.