jueves, 5 de abril de 2012

Capítulo 3: Te he echado de menos


Dejé la nota en la mesilla de Mery y bajé, y allí estaba Pablo apoyado en un coche negro, con unas deportivas, vaqueros, una camisa y un abrigo negro, al verme me saludó con la mano y me acerqué a él.
-Buenas noches – dijo con una sonrisa.
-Buenas noches corazón – sonreís – vaya que guapo te has puesto.
-Muchas gracias, tu también jajaja. Me gusta que me llames corazón – lo dijo con una sonrisa tímida.
-Ay lo siento, es involuntario me sale solo, sin pensar – lo dije con gran vergüenza.
-No, no si me gusta y cielo también jajaj. Bueno princesa ¿Subes?
-Claro jajaj ¿a donde me vas a llevar?
-A un sitio que me encanta, donde me voy para relajarme e incluso para componer, es un lugar mágico y que no mucha gente conoce.
-De acuerdo – entonces le miré y ambos sonreímos.
Iniciamos el camino hacia aquel lugar tan misterioso que para Pablo era tan especial, y que me quería enseñar, la verdad es que me tenía bastante intrigada, pero no dije nada.
Por fin llegamos, era una playa, mas bien una calita pequeña, que tenia un agua que brillaba a la luz de la luna y la hacia mas hermosa aún, el agua era cristalina y la arena muy fina, no había muchas pisadas en la arena y parecía que nunca nadie hubiese ido allí.
-¿Te gusta? - me peguntó.
-Es preciosa – me giré dejando de admirar aquel hermoso paisaje para mirar a Pablo y perderme en su mirada – gracias por enseñármelo.
-Gracias a ti, por venir conmigo – nos sentamos en la arena y nos quedamos en silencio acompañados del único sonido de las olas -¿te puedo hacer una pregunta?
-Claro
-¿Cuál de mis canciones es tu favorita?
-Puff pregunta difícil jajaja, todas me transmiten algo muy bonito y a la vez distinto entre ellas, todas son geniales, pero si tuviese que elegir yo creo que te he echado de menos y solamente tu son las ganadoras.
-Espera un momento en seguida vuelvo.
-Vale
Me quedé sola en aquella playa magnífica, relajada gracias al sonido de las ola, entonces oí una guitarra, me giré y allí estaba Pablo tocando los primeros acordes de Te he echado de menos.
-No quedas mas que tu
no quedo mas que yo
en este extraño salón
sin nadie que nos diga donde
como y cuando nos besamos
tenia ganas ya de pasar junto a ti
unos minutos soñando
sin un reloj que cuente las caricias
que te voy dando
juramento de sal y limón
prometimos querernos los dos
te he echado de menos todo este tiempo
he pensado en tu sonrisa y en tu forma de caminar
te he echado de menos soñado el momento
de verte aquí a mi lado dejándote llevar
quiero que siga así
tu alma pegada a mi mientras nos quedamos quietos
dejando que la piel cumpla poco
a poco todos sus deseos
hoy no hay nada que hacer, quedémonos aquí
contándonos secretos
diciéndonos bajito que lo nuestro siempre se hará eterno
fantasía en una copa de alcohol
prometimos volver a vernos
te he echado de menos todo este tiempo
he pensado en tu sonrisa y en tu forma de caminar
te he echado de menos soñado el momento
de verte aquí a mi lado dejándote llevar
yo te he echado de menos, yo te he echado de menos
¡silencio! Que mis dedos corren entre tus dedos
y con un suave desliz hago que se pare el tiempo
te he echado de menos todo este tiempo
he pensado en tu sonrisa y en tu forma de caminar
te he echado de menos soñado el momento
de verte aquí a mi lado dejándote llevar
Entonces la emoción pudo conmigo y me puse a llorar como una magdalena delante de Pablo, él se acercó rápidamente hacia mi, me abrazó y me dijo al oído.
-Princesa no tenías que llorar, ese no era el plan
-Lo siento, no lo puedo evitar
-No pasa nada, es bonito ver que alguien se emociona con una canción tuya – entonces nos separamos y sin dejar de mirarme a los ojos fue quitándome una a una las lágrimas que tenía en la cara – eres preciosa- me lo dijo con esa sonrisa suya que me derretía y yo me ruboricé – no me gusta verte llorar y lo impediré siempre que pueda.
-Vaya, eso no me lo esperaba – estábamos muy cerca, casi rozándonos, y el corazón me latía muy deprisa, deseaba que Pablo no se diese cuenta.
-Jajaja es verdad, eres una chica maravillosa, de esas que no se conocen todos los días o ni siquiera llegas a conocer y aunque no te lo creas me gustaría conocerte mas
-Vale jajaj a mi también me gustaría conocerte mas – entonces un escalofrío recorrió mi cuerpo debido al frió.
¿tienes frío? Sera mejor que nos vayamos, no quiero que mi princesa se resfríe – se levantó y luego me dio la mano para ayudarme.
-Me gusta que me llames princesa – le dije de camino al coche – me hace sentir especial
-Es que eres especial – lo dijo en a penas un susurro.
El camino de vuelta fue tranquilo, era un martes y no había demasiado trafico en la carretera a esa hora, aunque era invierno no hacia demasiado frío y la noche estaba estrellada, era una noche bonita, entonces llegamos a casa de Mery.
-Muchas gracias por esta noche Pablo ha sido muy especial para mi.
-Gracias a ti por venir conmigo, también ha sido especial para mi.
-Bueno me voy a ver si descanso un ratito, nos vemos en unas horas, que sueñes con los angelitos.
-Igualmente, hasta mañana princesa.
Salí del coche y me dirigí a la puerta, antes de entrar me gire por ultima vez hacia donde estaba Pablo, el cual, todavía se encontraba en el coche sin moverse del sitio donde me había dejado, me sonrió y agito su mano a modo de despedida, le sonreí y me metí dentro de casa. 

3 comentarios:

  1. Ooooooooooooo me gusta esta historia! Continuala porfavoooooooor!
    Besiitooos 

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  2. oii me encantaaaa es genial

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